internacional sobre el que sería prematuro pronunciarse. Lo que cuenta es que la empresa aceitunera cuyo local social, por cierto, ha sido pasto de las llamas esta misma tarde, codiciaba los inmuebles, bien porque planease reconvertirlos en paradores turísticos quealamparodelarecidivareligiosaquepadecemos rindiesen copiosos frutos, bien para especular con ellos de otro modo. Sabedora el holding de que la orden estaba a punto de entrar en la última etapa de su historia y antes de