fríos, las heladas? ¿Se congelaría, a que sí? LEONIDAS.- (Con asco.) ¡No me hables de la carne congelada! ZORRA.- ¿Y por qué el hombre no se congela? LEONIDAS.- Eso está clarísimo: ¡porque se viste! ZORRA.- Exacto, señor. ¿Y con qué se hace su vestido? LEONIDAS.- Toma, ¡con lana! ZORRA.- ¿Y quiénes le proporcionan la