le advertía al mecánico mientras se alejaba contento, dueño del terreno: "¡Allí te la encargo, al rato vengo a darle su vueltecita!" Los trenistas pasaban entre los botes de chapopote, los montones de estopa, saltaban el balasto con la alegría retozona delquereconocesucasa;sorteabanlosenvases vacíos, las cajas desvencijadas, los fierros torcidos, el cochambre. Cierto que no todo era limpio, el balasto yacía cubierto de porquerías, de cosas vivientes ahora carbonizadas,
DIE:065.22
RECONOCERII.1 - Darse cuenta [alguien] de que [alguien o algo] es una determinada entidad, ya percibida por los sentidos (esp. la vista)