... «¡La pareja etrusca! », recuerda de golpe, en una explosión interior. Ella sigue hablando: -... no hubiera podido enseñarte porque no sabía, porque nos engañan, y más en mi tiempo. Yo era una chiquilla leyendo novelitas en la peinadora dondetrabajabayviendogalanesenelcine.Claro,me deslumbró el primer sinvergüenza que conocí: el Tomasso. El viejo se queda atónito al oírla. ¿ Sinvergüenza el bravo marinero ? -