parecer, venía yo, pues, a presentarme por alguna razón, al capitán). Aunque, en verdad, esta palabra se usa tan sólo en la Marina, el muchacho me entendía y me señalaba hacia el piso superior. Las escaleras arrancaban del propio zaguán y yo subíayencontrabaarribauncuartoconlapuertaabiertaymeasomabay junto a una ventana había tres oficiales sentados a una mesa, el capitán en medio y dos tenientes, uno a cada lado. Yo entonces, me acercaba y el capitán me decía, señalando a una cuarta silla enfrente de él: "Tome