. Me he quedado sin dinero. Lo declara tan serio, casi fúnebre, que ella suelta la carcajada, más sonora aún bajo la bóveda de la Galería Vittorio Emanuelle, donde se han refugiado de una llovizna incipiente, ya al oscurecer. La gente vuelvelacabezayélsonríe.¿Cómoresistirseaese rostro jovial, a esos dientes blanquísimos? Pero en el acto se enfurece: -¡Maldita sea! Las tierras y los ganados son míos,
SON:179.25
SONREÍR.1 - Reír suavemente, con el gesto pero sin emitir sonidos