selo) ¿Celos? ¿Usted? ¿De mí? JAVIER.- Cuando se iba, no soportaba la idea de que volviera a su lado, de que los dos tuvieran una vida en común en la que yo no podía participar. JUAN.- Compréndalo... Los maridos también tenemos algunos derechos, aunque sean de segunda mano. JAVIER.- Cuando estaba conmigo, podía adivinar si la noche anterior había estado con usted... ¡Y eso me enfurecía!