pueblo de Estados Unidos de América, pero estamos dando esto por hecho durante demasiados años". Por mucho que este Falwell pueda representar el límite extremoso y delirante (aunque el hecho de que una televisión le conceda un espacio cotidiano hace dudar de que los grupos para los que no resulta groseramente caricaturesco sean solamente unas muy minoritarias camarillas de fanáticos), en él se marcan con toda nitidez los dictados de la moda. ¿No ha sido acaso en más altas instancias -de