- ¡Qué vas a coger, mujer! No. Bueno, a lo mejor, pulgas sí que habrá; pulgas casi seguro. ELENA.- ¡Pulgas! CHUSA.- No pasa nada. Al día siguiente te has acostumbrado. Y si no, nos echamos limón. ELENA.- A mí me da un poco de cosa con los moros. CHUSA.- Conmigo siempre se han enrollado bien, pero hay que tener mucho cuidado. A un amigo mío