no sigas pegandome la paliza con tu dichosa reunión. Ya está, pues ya está. Se acabó. Salíamos tres chicas así, con los brazos abiertos. Una de rojo, otra de verde y otra de azul... luego avanzaba yo sola y me volvía hacia un lado. VICTOR.- Antes te ibas adelante y atrás tres veces, y luego dabas una vuelta por el escenario... MIRIAM.- Lo sé muy bien. Y no eran tres veces sino cuatro