lo OTAN, puesto que no hay en él necesidad per se, pero, a efectos que huelga recordar, ¿qué empece el que racionalmente no la haya, cuando entran de por medio voluntades dispuestas a imponer tal vínculo como necesidad, manejando el negocio con arreglo a la más reciente novedad en procedimientos coercitivos, que es presentar las cosas en paquetes? Tampoco la espada de Breno era una pesa legal en la balanza, ni una razón legítima, y, sin embargo,