selasselasle, se dijo Thatcher, "Galtieri ha entrado al trapo!" Y por cierto que fue un espectáculo notable ver cómo el hundimiento de este destructor británico apagaba instantáneamente el farisaico escándalo, la afectada consternación que se habían visto obligadas a manifestar las democracias occidentales ante el torpedeamiento del General Belgrano: ya no debían nada. Margaret Thatcher sabía perfectamente que jamás habrá mesa de negociaciones en que derecho alguno pueda establecerse tan sólidamente como en el campo de batalla
RAT:202.17
MANIFESTAR.1 - Hacer ver [algo no físico]. Mostrar