como las de prevención, disuasión, etcétera, más que ingenuos intentos de racionalización o de enmascaramiento. La función estrictamente ideológica de la pena de muerte es dar sosiego a los débiles morales, disipar la turbación de las conciencias pusilánimes, permitiendoles sustraerse ante la mole de la entera responsabilidad social que realmente concierne pro indiviso a cada uno y debería, por tanto, afectarle. Esta función ideológica de la pena de muerte, que se alcanza ofreciendo un criterio de total seguridad
RAT:139.05
PERMITIR.3 - Hacer posible [la realización de una determinada actividad o hecho].