Texto contextualizado: |
dolor. Debió suceder en segundos pero lo percibió con tal detenimiento que le pareció una escena interminable. Sí, allí estaba. Antes de ver sus ojos reconoció la mano tendida al azar ante la gente apresurada; ni siquiera llegó a escuchar la cantinela con que se dirigía a los viandantes porque reconoció la mano temblona, luego la mirada algo acuosa y después, ya retrayéndose a pesar de su pasmo, la otra mano temblona sujetando un trapajo entre los dedos. Cuando volvió |
MIR:083.14 |