hablé de este comportamiento mío. Has de saber que, como Ulises ante las Sirenas, yo no deseaba apurar todo el exaltado mensaje de tu voz, que hacía sollozar a la tarde. Por eso, acababa abandonando la lectura y emprendía un paseo por el bosque. Casi siempre lo hacía cuando comenzabas a cantar la segunda de las piezas, aquel Lascia ch'io pianga excesivamente inhumano de puro humano. Al final, no existía lugar del jardín al que no llegara tu voz.
CAR:036.13
EMPRENDER - Iniciar una actividad, con frecuencia un desplazamiento largo