puerta. Jano quiso alzarse, pero no pudo. Oyó por tercera vez, ligera e insistente, la llamada en la puerta, pero se encontraba completamente desfallecido. El alcohol y el sueño le vencían. El sueño le iba arrastrando muy dulcemente y dejó de sentir. 7 Alguien seguía golpeando en la puerta de la habitación. Jano abrió los ojos y oyó cómo llamaban, pero ahora de forma más fuerte e insistente. Era de día y la luz bañaba toda la
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ARRASTRARII - Impulsar a alguien a un determinado estado, actitud o acción