presentárselo así, al lado de esa muchacha cuyo ágil caminar pone en evidencia el paso cauteloso del hombre, apenas repuesto!... Pero es él, ¡ es él! Hortensia acude a la cocina para abrirles el portal y luego avanza por el pasillo, esperando tras la puerta el ruido del ascensor. ¡ Ya!... Al -abrir sorprende al viejo con el dedo en el aire hacia el timbre, en una cómica postura de película cortada que les hace