días de haber nacido. Un señor de barba blanca le preguntó por el abuelo y Onésima, que estaba cerca, contestó que tenía el corazón destrozado por tan dolorosa pérdida y que el médico le había dado un tranquilizante y le había prohibido recibir visitas. Miguel consiguió escaparse un momento del salón y se asomó a la habitación en que se hallaba recluido el abuelo. Las sábanas de la cama estaban revueltas y sobre ellas se removía entre jadeos aquel cuerpo débil, insospechadamente viejo
TER:108.17
PROHIBIR - Impedir o negar la realización o el uso de algo