pardos donde venían a morir las luces. Buscando distracción paseó la mirada por las ventanas que estaban encendidas y de pronto clavó la vista en una de ellas. Le había parecido ver una figura cruzando ante el marco y permaneció atento, divertido por la curiosidad. Un juego de sombras en la pared frontera a sus ojos le advirtieron que alguien se agitaba en uno de los extremos de la habitación. Luego las sombras desaparecieron y él bajó los ojos. Cuando los alzó de nuevo