Texto contextualizado: |
del volante, le hizo seguir una caprichosa trayectoria hasta que nos hubimos cerciorado de que nadie nos seguía. Aprovechando el respiro que este paseo nos daba, pusimos a la Emilia al corriente de las vicisitudes por las que habíamos atravesado y dimos rienda suelta al alborozo que sentíamos por haber salido con bien de la aventura y por haber rescatado a María Pandora. Como fuese que, pese a la alegría imperante, una lágrima se desprendiera de mis pestañas, nunca aterciopeladas y ahora casi |
LAB:206.16 |