tarde: es, por consiguiente, un capricornio. Los nacidos bajo este signo tienen justamente fama de obstinados, secretos y taciturnos: no en vano, el bigotudo padrecito de los pueblos fue uno de ellos. Pero el año que corre -como apunta certeramente la especialista del periódico con quien se asesora- reúne una serie de rasgos y características propios. El veintiuno de diciembre, el sol ha entrado en la fracción de la eclíptica comprendida entre 270o y 300o, recorriendo el