el viejo se ciega. Aún tiene en la mano el cinturón, que no se había ceñido. Lo empuña por la hebilla y abre violentamente la puerta del baño. Si su hijo no sabe domar a esa mujer, él le enseñará. Pero la puerta siguiente en el pasillo, con su rojiza luz por la rendija, es la de Brunettino. Se detiene ante ella un instante; justo el necesario para que estalle en la casa el grito. Un grito, sí
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ENSEÑARII - Hacer saber o transmitir [un conocimiento o una habilidad] [a alguien] para que los aprenda