impedido coger más doblones? --preguntó Agus, prestandose ingenuamente al juego. --Claro, quién iba a ser. Si no fuera por los monstruos, ya habría sacado todo el tesoro. Un sábado, el único contertulio que acudió fue el hombrecillo de los pájaros. El abuelo no habló demasiado, se mantuvo todo el tiempo educado y distante, y escuchó con atención a Miguel cuando éste contó la historia de Oliver Twist. Al cabo de una hora, el hombrecillo