el estado cubo cercando y deteniendo, límites en el ahora y el ahí que de alguna manera era reposo. El proceso se abrió en Poitiers a fines de julio de 1956. Robert fue defendido por Maître Rolland; el jurado no admitió las circunstancias atenuantes derivadas de una orfandad temprana, los reformatorios y el desempleo. El acusado escuchó con un tranquilo estupor la sentencia de muerte, los aplausos de un público entre el cual se contaban no pocos turistas británicos. Poco a poco