con el pelo de la mujer, que continúa-: ¿De qué parte del Sur es usted? Ahora comprende el viejo: ella le ha reconocido el acento y también debe de ser de allá abajo, aunque apenas se le note. Se siente cómodo en el acto y se ajusta bien el sombrero. -De Roccasera, junto a Catanzaro. ¿Y usted? -Del otro mar. Amalfi. -Tarantelona, ¿eh?