todo, no hay óbice para que, una vez resuelta nuestra engorrosa papeleta, no pongamos en sus manos de usted una suculenta exclusiva. Para lo cual, claro está, precisamos esos datos que usted, a buen seguro, nos proporcionará a más tardar... --Esta misma tarde. A eso de las cinco el que no está pluriempleado está borracho y la redacción del periódico se queda vacía. El portero tiene llave y me dejará entrar. ¿Quién paga esta consumición?