no podía hacerle eso! Su enseña roja, orientada al bulevar, le llenó de consternación: ¡ahora se llamaba! El militante bebedor de calvados sintió deseos casi irreprimibles de sollozar: su periódico, su entrañable periódico le había vendido. Se apoyó en un árbol, incapaz de sostenerse: en la esquina, un grupo de vecinos, anonadados como él, discutían acerca de lo ocurrido, manifestaban su frondoso estupor ante la catástrofe. ¿Qué mano oculta había urdido
PAI:014.29
VENDER.1 - Dar [una posesión] a cambio de una cantidad de dinero