casa de éste. Para poder encontrar la clase de referencia de un constructo conviene empezar por mostrar la forma lógica de éste. En el caso de un predicado nario P, que figura en un contexto C dado, lo concebimos --usando indicaciones contenidas en C-- como una función de ntuplas de objetos al conjunto S de las proposiciones (verdaderas, falsas o no decididas) que contienen a P. Más exactamente, escribimos: P: A X B X ... X N --