Texto contextualizado: |
se desconoce el móvil del crimen -algunas versiones apuntan a una discusión previa entre ambos-, el juzgado cuenta con testigos presenciales de los hechos. Según relataron vecinos del lugar, Hortensio Garrido, enfundado en un saco de dormir, daba una cabezada, guarecido del fuerte frío reinante, bajo la marquesina de la parada de autobús de la parroquia cambadesa de Vilariño. Poco antes -las seis de la tarde del pasado miércoles- había estado en un bar que dista unos veinte |
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