, ¿cómo no habrá siquiera alguna rata o sapo que sean casi un ratón, casi una rana?), ciénagas, lodazales, muladares, alcantarillas, cloacas, moncloacas, que uno no sabe qué encuentran todavía en España a amar, como no sea a sí mismos y a su propia fabulación y alegoría. (Por cierto que esta espléndida floración conceptual de la nueva intelectualidad de derechas española no resulta de rápida y fácil asimilación para mentes más sencillas y menos preparadas,