me. Valían una fortuna. ¿Fueron regalos suyos exclusivamente? JAVIER.- Sí. JUAN.- ¡Qué generoso! JAVIER.- Elena era infantil e inconsciente. No tenía noción del valor de las cosas. Lo que le divertía era la sorpresa, el juego. JUAN.- Quizá... Bueno, quizá tuviera otros amantes, ¿no cree? JAVIER.- (Convencido.) No. JUAN.- ¿Por qué está tan seguro? Lo mismo