, todas las facilidades, pero sin irse a Inglaterra ni rollos de esos malos. Aquí, a las claras y por la seguridad social. Y si lo quiere tener, pues ningún problema, estupendo, todos encantados. Y nacerán ya de más mayores cada vez, para que no lloren por las noches, ni se caguen, ni se pongan malos. Y nada más nacer, zas, una renta vitalicia, un dinero bien, como les pasa ahora a los