y cerrar la puerta, Jaimito y Chusa se quedan con la mirada perdida en el vacío. Lo que era un juego se ha convertido en soledad.) JAIMITO.- Qué suerte tiene el tío para todo. Y encima se queja. Es maja, ¿verdad? CHUSA.- Creí que no te gustaba. JAIMITO.- ¿A mí? Sólo digo que es muy guapa, y que está muy buena. Encima se meten ahí los dos... CHUSA.