caso a nadie que, digan lo que digan, se ve que vas debajo. PALOMA.- Qué mala entraña. Pues me lo quito todo. Lo hace. Se queda en ropa interior.) CARMIÑA.- No lo dudes, PALOMA. Así. Qué sexy, hija. (BEGOÑA se ha cubierto con un gran velo blanco y está arrodillada ante el oratorio.)