Humanidad- y procediendo en cinco minutos, y caiga quien caiga, a su achicharramiento termonuclear? Y si esto se me reprocha como una caricatura tendenciosa y mal intencionada, diré que no es un punto más ridícula que la que se merece el Occidente, a menos que reconozca que cualquier carisma histórico, cualquier "destino manifiesto", es -aparte del más vetusto camuflaje moralizador de todo acceso de hybris y de furor de predominio- una superchería incapaz de garantizar absolutamente nada,