Texto contextualizado: |
las aristas, como si la oscuridad de la noche hubiera arrebatado la vida a los colores. Toda la tarde de aquel día de primavera estuvo cubierta por un cielo plomizo que el crepúsculo manchó hasta la tiniebla. Tomó aire lentamente, ladeando la cabeza; de seguido, un ligero temblor en la mandíbula y las muñecas le movió a encerrar el rostro entre las manos; comenzó a llorar, tensa y dificultosamente; siguió llorando sin ruido, despacio; al principio con vacilación, |
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