? Tú: Ya he tocado el timbre de alarma. El portero vendrá en seguida. Ella: Eso me enseñará a fiarme de ti. No te basta con tratarme como me tratas. Eres un verdadero monstruo. Como ocurre con cierta frecuencia, el portazo desatento de algún gamberro ha bloqueado momentáneamente el ascensor entre dos pisos y cuando el dispositivo se pone de nuevo en marcha nuestro héroe se enjuga pausadamente el sudor: alguien, un alma oportuna y caritativa, debe
PAI:161.21
OCURRIRI - Suceder. Producirse espontáneamente un suceso