de la Biblioteca Ambrosiana...» 4 Alguien sacó a Jano del pasado, de la redacción de su siempre inacabada carta, golpeando nerviosamente con los nudillos en la puerta de su habitación. Era Adriana. Venía muy excitada. Acababa de discutir airadamente con Marescu. Jano oyó asombrado cómo le aplicaba al arquitecto los duros calificativos de borghese, alienato, fascista, deficiente, tan propios de ella y de su lenguaje en los momentos en que se excitaba. En contraposición, Jano recordó
CAR:063.05
DISCUTIR - Defender o manifestar opiniones contrarias