en suave gradación de colores, desde el más oscuro, casi negro, de ciertas sombras en el fondo hasta el blanco decidido de la ropa y los dientes. Metió la foto en el sobre y lo dejó en la mesilla. Releyó una de las líneas de la carta: «he podido (¡por fin!) reservar diez días sólo para ti, para pasarlos solamente contigo». Antes de doblar la cuartilla detuvo su mirada en la frase de despedida:
TER:056.16
RELEER - volver a percibir e interpretar un escrito