no cesaba de hacer preguntas. Miguel estaba tumbado en la cama y se había colocado una moneda sobre la frente y otra sobre la barbilla: si hablara se le caerían. Pero Agus insistía, dónde los había encontrado, y terminó quitandoselos para que pudiera contestarle. Miguel se revolvió con agilidad y al instante se los arrancó de las manos. «¡Son míos!», exclamó con arrogancia. No cesaron, sin embargo, las preguntas de Agus,
TER:044.30
QUITARII.1 - Tomar o coger [algo] [a alguien] en contra de su voluntad