quedé solo me dije: «La noche, que empezó amenazadora, concluye bien.» No quiero exagerar, pero aparentemente he olvidado (mi organismo ha olvidado) la gripe. Ahora el profesor me trae el té. Vamos a empezar la entrevista. --¿Puedo preguntar lo que se me ocurra? --Lo que se le ocurra. --¿Usted se considera un hombre contradictorio? --Yo diría más bien voluble. Impulsivo. --Durante un año se me escapó