comprendes ? ¡ El médico se ha vendido, tonta! ¡ Me evacuan y encierran otra vez a Brunettino! Pero el Bruno es zorro viejo y no abandona su guardia. Hortensia finge darle la razón, pero cada día le inquietan más esas deformaciones de la realidad. Sobre todo, ese «continuar la guardia»: -¿Es que has vuelto estas noches con el niño? -Sin faltar una --canta ufano. -¡Estás loco! Te mandaron reposo