le sostiene que la clave del comportamiento humano la proporciona la Psicología, la ciencia del alma; sede de los impulsos, el razonamiento, la memoria, la personalidad. Buoncontoni empezó discrepando cortésmente, pero la tenacidad del alemán le ha ido exasperando poco a poco. Al fin, acalorados ambos, llega a decir: -Mire, doctor, esta discusión no tiene sentido, porque la Psicología no existe. Es como la Teología, esa contradicción en términos porque es absurdo razonar