ven al sistema democrático como una mera excrecencia del capitalismo liberal. Yo he visto votar a la multitud india, pobre y analfabeta: es un espectáculo que devuelve la esperanza en los hombres. Lo contrario del espectáculo de las multitudes que gritan y vociferan en los estadios de Occidente y América Latina... Cierto, contrasta la democracia política de la India con la pobreza de su gente y las terribles desigualdades sociales. Muchos se preguntan si no es ya tarde para abolir la miseria: