"Mañana hablaremos, Mutto" --o Turiddu, o el que fuera-, "que quien de noche se afana, de día- se agalbana...". Ya te digo, una chismosa, la casa. ¡ No disimulaba ni el tris-tris, tris-tris, aprisa, más aprisa, de la madera fina en la cama de los amos, arriba!...