- ¡ Ay, Hortensia, Hortensia! ¿ Por qué no tendría yo la suerte de que me enseñaras a mí ? Pero Hortensia se recuerda muy bien a sí misma cuando era joven. -Entonces yo tampoco sabía... No nos quejemos, Bruno. Si nos hubiésemos encontrado antes no hubiéramos estado maduros el uno para el otro... ¿Te parece poco lo que tenemos ? Pues casi nadie lo consigue en esta vida. Ni a nuestros años ni en la juventud... Casi