tiene disculpa porque se está muriendo y lo sabe, aunque más le valía estarse quietecito en un sillón, encomendandose a Dios. Pero ¡sí, sí, quietecito! No para, y siempre alegre... No es que ría mucho; es el gesto, la tranquilidad... A lo mejor, la misma enfermedad le engaña; a veces el Señor tiene esa compasión... ¡ Ay, qué triste es llegar a la vejez! ¡Dame una buena muerte,
SON:147.07
REÍR.1 - Manifestar alegría mediante determinados movimiento y ruidos realizados con la boca