metro pasó a contarme que, como yo había ya supuesto, Toribio Pisuerga, más conocido de la afición como Muscle Power, sabedor de que una crecida cantidad iba a cambiar de manos, de dónde y de cómo, había planeado la sustracción con su complicidad, la de Suzanna Trash, a efectos de lo cual la había enviado a Madrid hacía dos días con instrucciones de personarse en la cafetería, pronunciar la contraseña, recibir el maletín y salir arreando. --Aunque