, yo no podría tocarla. Eres mi hermano, Javi... Mi hermano. Se marchó furiosa. Lo que te haya contado ha sido para hacerte daño, pero es mentira. Mentira... (Hay una pausa. Javier bebe en silencio. Deja el vaso en cualquier sitio.) ¿Me crees? JAVIER.- Sí... (Los dos hermanos se abrazan estrechamente, con emoción. Luego, Javier se separa y se dirige hacia el ventanal. Ernesto,