Texto contextualizado: |
la década de los setenta, se fue difuminando poco a poco hasta alcanzar cotas de mínima representatividad. Actualmente, son escasos los grupos que operan en el municipio, y más escasos aún sus afiliados, de forma que Santiago se puede decir que está prácticamente al margen de toda actividad ultraderechista, con la salvedad de la organización Falange Española y de ciertos grupúsculos más ocasionales que permanentes. En ese sentido, Santiago no fue a la zaga de otras ciudades gallegas, como Vigo o |
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